viernes, 5 de enero de 2007

ATENCO EJEMPLAR.

La capital de México fue paralizada en las primeras horas del cuatro demayo. Los torpes urbanistas que jamás lograron tránsito fluido en la ciudad másdesordenada del planeta, jamás consideraron que basta con bloquear las avenidasimportantes de los cuatro puntos cardinales para detener la producción en elDistrito Federal. Al oriente, la Calzada Ignacio Zaragoza fue cerrada por elFrente Popular Francisco Villa-Independiente que inutilizó de paso todas lasrutas distribuidoras de las terminales del metro en Pantitlán y detuvieron lostransportes rumbo a Puebla y los alrededores. A este gran tapón contribuyeronlas policías locales y federales que formaron un cerco militar para impedir lallegada a Texcoco y a Atenco. El viejo y liquidado proyecto de los Colegios deCiencias y Humanidades de la UNAM en la periferia de la ciudad para servir a lapoblación más pobre y desarrollar cultura popular, funcionó movido por losadherentes de la Otra Campaña que acordaron en la reunión con el delegado Zeroen Tlatelolco, cerrar sus escuelas y las grandes avenidas cercanas a ellas. ElCCH Vallejo cumplió y la enorme Terminal Norte de autobuses foráneos quedóinutilizada. El CCH Sur bloqueó la avenida más larga del mundo para rendirculto a su nombre de los Insurgentes y lo mismo hicieron los del CCH Oriente,para incomunicar el Estado de México con el Distrito Federal y los deAtzcapotzalco para aislar el poniente, mientras los de Ciudad Universitaria seincorporaron al cierre de Insurgentes e hicieron lo mismo con AvenidaUniversidad. Hubo marcha matutina en Ciudad Universitaria y gran asamblea en elauditorio Ho Chi Minh en la Facultad de Economía donde los desacuerdos menoresceden ante la urgencia estratégica: Atenco somos todos.

América del Valle, de figura menuda y combatividad grande construida con supadre, interrumpió entre vítores de aprobación la comparecencia vespertina deldelegado Zero en el histórico Tlatelolco. Informó y convocó, sin saber aún quelas ordenes de aprehensión en su contra estaban en marcha. Puso el acento en labrutalidad del ataque: "los perros andan por ahí merodeando, buscandoquien se las pague porque no dicen que del otro lado cayeron algunos hacemos el llamado a que se movilicen donde quiera que estén.Atenco son también ustedes.Cuando existe dignidad hay muchas manos que se suman a esta lucha que no essólo ese pedacito de país llamado Atenco". Dio nombres de los detenidos yanunció la necesidad de autodefensa ante quienes causaron la muerte del jovende 14 años Javier Cortés.

La televisión pronto pasó de la disputa de las noticias frescas y ladenuncia de la golpiza granadera que se llevó un camarógrafo de Televisa, a losmensajes de los funcionarios del Estado de México, la Presidencia y loscomandantes policíacos con los gastados estribillos del estado de derecho y lareprobación a la violencia. El delegado Zero, en cambio, declaró en la Plaza delas Tres Culturas de Tlatelolco la alerta roja de las tropas del EZLN, lasuspensión de la agenda de la Otra Campaña y la disposición total sintetizadaen una frase: "los zapatistas somos hoy Atenco". La UniversidadAutónoma de Chapingo, a 15 minutos de Atenco cuando no hay gorilas de pormedio, esta convertida en el centro de esa especie de estado mayor populardonde el dolor y la indignación adquieren rigores combativos. En un gesto dedignidad inusitada, Serffio Barrales Domínguez, Rector de Chapingo, hadeclarado su "más rotundo rechazo a los hechos de violencia ocurridos enlos municipios de Atenco y Texococo, que han conducido a la pérdida de vidashumanas. Hacemos un llamado a las autoridades federales, estatales ymunicipales para que privilegien el diálogo y la concertación para resolver elconflicto". Vana esperanza: Nacho del Valle, el queridísimo dirigente deAtenco, constructor con sus compañeros más decididos del Frente de Pueblos enDefensa de la Tierra, ha sido internado en el Penal de Máxima Seguridad deAlmoloya no sin dejar que las cámaras de las televisoras mentirosas, lomostraran con la cabeza cubierta por su ensangrentada camiseta. El terrorismode estado marcha, forma una pinza para ocupar la plaza de San Salvador Atenco,rompe los pocos vidrios de las ventanas que se salvaron en la noche, abre apatadas las puertas y saca a rastras, garrotazos y patadas a más de ciensobrevivientes del brutal ataque policíaco.

Sometido por la compraventa de espacios, la democrática Jornada, publica elterrible jueves 4 "Texcoco, la verdad" de Nazario Gutiérrez Martínezel perredista presidente municipal de Texcoco que aclara lo de siempre: son unapequeña minoría, ya habían causado destrozos y heridos entre los heroicospolicías, se trata de lograr "mayor orden, seguridad y comodidad, tantopara ellos como para la ciudadanía". Nada dice de su compromiso conWal-Mart para modernizar Texcoco lo que quiere decir exterminar a losvendedores ambulantes cueste lo que cueste. Nada cuenta para las bestias enacción la tradición de vender flores en puestos improvisados en la calle paraalegría de quienes encuentran en primavera los prodigios entregados por lanaturaleza prodiga.

Hay decenas de universitarios desaparecidos en la noche del tres al cuatrode mayo cuando cumplieron las convocatorias de América del Valle y el delegadoZero. No se sabrán los presos y los heridos hasta que con caras decircunstancias, los desinformadores de los noticieros televisuales lean listaspreparadas por las Procuradurías y los Ministerios Públicos.

Se cumple un ciclo, se reitera una verdad. Al principio del sexenio delprimer presidente panista en México, San Salvador Atenco probó machete en altola urgencia de la autodefensa popular y logró detener el arrasamiento dedecenas de hectáreas para construir un aeropuerto internacional de supuestobeneficio público. Quienes nunca han usado un avión y sólo conocen loshelicópteros cuando sobrevuelan amenazantes sus comunidades en lucha, nocedieron ni un ápice, dieron ejemplo mundial de digna resistencia organizada yprocuraron desparramar su ejemplo ahí donde es necesaria su presencia. Elagónico sexenio del desastre neoliberal, termina con el intento de exterminiode Atenco. Esto es sólo la apariencia. Sigue lo que sigue.

No hay comentarios: